Una extrema solución al problema de la superpoblación.
Sebastián Lindner
@sebaslindner
Especial para El Popular. (La crítica no contiene spoilers)
Tal vez con algo de retraso llega la culminación de las historias conspirativas de Dan Brown a la pantalla grande. El destino de la humanidad estará nuevamente en las manos de un docente universitario con muy poco de héroe de acción pero mucho cerebro en cambio.
Con muchísimo éxito de taquilla se presentó en el 2006 la primera adaptación de un best seller de Dan Brown, “El Código Da Vinci” y tan sólo tres años después llegó la continuación con “Ángeles y demonios”. En estas dos películas, que tuvieron sus buenos roces con la Iglesia Católica, el objetivo que perseguía el experto en simbología religiosa era encontrar el “Santo Grial”, que era nada más y nada menos, que la progenie de Cristo.
En el medio de semejante búsqueda se mezclaba una enmarañada y muy divertida historia que involucraba al Priorato de Sion, Isaac Newton, los números de Fibonacci, Leonardo Da Vinci, la Orden de los Templarios, el museo del Louvre y una interesante cantidad de obras de arte con mensajes crípticos ocultos, entre otras decenas de cuestiones históricas y teorías conspirativas. Luego, en la segunda todas estos temas se mezclaron con los Illuminati y una bomba anti-materia.
Ahora, en “Inferno”, ocho años después, se repite la trilogía de David Koepp en el guión, Ron Howard en la dirección y el bueno de Tom Hanks en el rol principal del profesor experto en simbología Robert Langdon. Pero esta vez la historia no es tan rebuscada y aunque no deja de ser entretenida adolece del arco argumental de las anteriores.
Ahora, Langdon (Hanks) deberá salvar al mundo de un virus desarrollado por un excéntrico millonario que tiene la teoría de que si no desaparece la mitad de la población humana actual, algo así como 8000 millones de personas, en 100 años la raza humana habrá desaparecido de la tierra. Esta vez contará con la ayuda de una bella doctora (Felicity Jones) y le costará bastante distinguir a los aliados de los enemigos.
Esta vez el condimento artístico y los misterios a resolver tendrán todos que ver con el poeta italiano Dante Alighieri y su “Divina Comedia”, obra fundamental en el pensamiento renacentista, más precisamente con su descripción del infierno que fuera retratada en la pintura de Boticelli. Por esto es que el profesor universitario y la doctora deberán recorrer iglesias, palacios y sitios históricos de Florencia y Venecia (aunque más tarde también van a Estambul) para encontrar las pistas ocultas en cuadros y esculturas que les permitan encontrar donde se encuentra oculto este mortal virus.
La mano experimentada de Howard nos brinda una película que no deja de entretener ni pierde el ritmo durante las dos horas que dura, mucho menos mística y misteriosa que las anteriores, probablemente algo que los seguidores de la saga van a extrañar, pero deliciosa desde lo visual, con una muy buena selección de locaciones, correctas actuaciones y totalmente autoconsciente de sus limitaciones. En definitiva, una propuesta llevadera y correcta en todos sus apartados pero que podría haber sido mucho más interesante si se pegaba más al libro como las anteriores.
Peliculómetro: 71%
FICHA TÉCNICA:
TÍTULO ORIGINAL: “Inferno” (2D)
GÉNERO: Suspenso / Thriller.
PAÍS: Estados Unidos / 2016
DIRECCIÓN: Ron Howard
ELENCO: Tom Hanks, Felicity Jones, Sidse Babett Knudsen, Irrfan Khan, Omar Sy, John Donahue, Ana Ularu, Irrfan Khan y Ben Foster.
GUIÓN: David Koepp, basado en la novela de Dan Brown
PRODUCCIÓN: Brian Grazer, Ron Howard, Michael De Luca y Andrea Gianetti.
DURACIÓN: 121 minutos.
PÁGINA WEB: http://www.infernomovie.net/site
CALIFICACIÓN: Apta para mayores de 13 años.
IDIOMA: versión doblada al español y original subtitulada
CINE: Flix Cinema (Cine Walmart).
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