La tentación por la oscuridad tiene forma de mujer.
Sebastián Lindner
@sebaslindner
Especial para El Popular. (La crítica no contiene spoilers)
Viene de ganar el premio a mejor drama en el Festival Sundance 2015 y con un aluvión de buenas críticas a nivel mundial, promete borrar del imaginario colectivo la idea de la bruja simpática que tanto Hollywood como Disney han querido instalar.
A primera vista, ni el poster ni el trailer hacen justicia con lo que veremos en “La Bruja” y probablemente diremos antes de verla: “otra vez una película de terror llena de golpes de efecto destinada a asustar niños”. Pero lo cierto es que la festejada ópera prima de Robert Eggers es una joyita que escapa de todos los clichés y viene a renovar el género del terror y el horror en los que parecía que con poca plata, mucha sangre falsa y guiones que parecían salir todos de una linea de montaje fordista, se podía lograr una buena ganancia.
La experiencia es muy inmersiva tanto en el clima como en la atmósfera, en parte gracias a una preciosa escenografía, una musicalización inquietante y una fotografía naturalista que haría la envidia de otras grandes producciones, y también por la utilización de diálogos que fueron tomados directamente de los registros históricos de los “juicios” que se hicieron a supuestas brujas en la Nueva Inglaterra de 1630. Como frutilla de la torta, las actuaciones (especialmente de los niños) son muy buenas y colaboran para generar un clima muy intimidante y opresivo, donde el horror se irá desarrollando minuto a minuto.
Con una reconstrucción de época magistralmente lograda, Eggers nos meterá en la vida intima de William, un devoto puritano del siglo XVII que, con su familia completa es expulsado de una colonia británica e intentará rehacer su vida lejos del pueblo y muy cerca de un sombrío bosque. La familia compuesta por su esposa, un bebé, dos pequeños hermanos mellizos, un niño que está por entrar en la adolescencia y una joven de 15 años verá como todo se le complica, poco tiempo después de instalarse en este nuevo lugar, a partir de la misteriosa desaparición del recién nacido. Los niños comenzarán a ser “influenciados” por una gran cabra negra, la leche se convertirá en sangre, el pecado innato se hará presente, y claro, la bruja del título que vive en el bosque hará su aparición.
Dicen que el director, que evidentemente tiene una fijación especial con el tema, estuvo cuatro años investigando en museos sobre casos de brujería para lograr una ambientación fiel al período donde se ubica la película. También dicen, que gracias a “The Witch”, Eggers fue contratado para hacer una recreación de “Nosferatu”.
Pero lo interesante no es sólo lo que dicen en el mundo del cine, sino lo que sucede cuando termina la película, pero no en la pantalla en la que sólo veremos los títulos, sino en las butacas. Mucho silencio y adolescentes que se retiran con cara de desconcierto, se asustaron pero no entienden bien cómo y porqué y quizás por primera vez les cueste dormir después de ver “una de terror”. Por otro lado, los amantes del género no querrán levantarse de la silla, sonreirán y respirarán nuevamente aire fresco.
Peliculómetro: 89%
FICHA TÉCNICA:
TÍTULO ORIGINAL: “The Witch: A New England Folktale” (2D)
GÉNERO: Misterio, Terror, Drama.
PAÍS: Estados Unidos – Canadá – Reino Unido / 2016
DIRECCIÓN: Robert Eggers.
ELENCO: Anya Taylor-Joy, Ralph Ineson, Kate Dickie, Harvey Scrimshaw, Lucas Dawson, Ellie Grainger, Julian Richings, Bathsheba Garnett, Sarah Stephens y Jeff Smith.
GUIÓN: Robert Eggers.
PRODUCCIÓN: Daniel Bekerman, Lars Knudsen, Jodi Redmond, Rodrigo Teixeira y Jay Van Hoy.
DURACIÓN: 92 minutos.
PÁGINA WEB: http://thewitch-movie.com/
CALIFICACIÓN: Apta para mayores de 13 años,
IDIOMA: Inglés subtitulada
CINE: Flix Cinema (Cine Walmart)
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