El futuro llegó hace rato, pero en otra dimensión.
Sebastián Lindner
@sebaslindner
Especial para El Popular. (La crítica no contiene spoilers)
Un inteligente relato de aventuras,
con el espíritu creativo de los grandes científicos siempre presente, que
despliega un universo visual inigualable para que se luzcan los protagonistas:
George Clooney y Britt Robertson.
Hay muchos detalles que hacen que “Tomorrowland” sea
una propuesta mucho más que interesante para disfrutar en pantalla gigante. En
primer lugar, su director Brad Bird (“El Gigante de Hierro”, “Los Increíbles” y “Misión
Imposible: Protocolo Fantasma” entre otras películas), conocido amante de la ciencia ficción, rechazó nada menos que la
posibilidad de dirigir “Star Wars: Episodio VII” para llevar adelante este proyecto de Disney con la ayuda en la
producción y el guión del co-creador de la famosa serie televisiva “Lost”:
Damon Lindelof.
En segundo lugar, estamos ante una historia original
- ni una remake, ni una adaptación - que no está basada en ningún éxito
literario, no intenta convertirse en una saga con varias continuaciones,
tampoco está basado en un cómic y a pesar de ser una distopía (territorio hasta
ahora nunca visitado por la empresa del famoso ratón), el mundo está roto, o
por romperse, pero tiene arreglo, siempre y cuando alimentamos al lobo correcto.
Bastante diferente al estreno del fin de semana pasado: “Mad Max: Fury Road”.
Los comentaristas de cine que dijeron que es sólo un
truco publicitario para atraer al público a una de las atracciones menos
visitadas de Disneyworld, evidentemente no vieron la película. Originalmente
creada en 1955, el Tomorrowland de Brad
Bird, fue construido gracias al aporte
de soñadores varios que trabajaban en conjunto para mejorar nuestro planeta. Científicos,
artistas e inventores debieron ocultar este casi mágico lugar del resto del
mundo y lo hicieron en una dimensión paralela. Allí llegará un chico prodigio e
inventor llamado Frank Walker (George Clooney), invitado por Athena (Raffey
Cassidy), una hermosa y extraña niña.
Los años pasarán y Frank, convertido en una especie
de científico loco, ya adulto y expulsado de Tomorrowland, deberá ayudar a la joven
Casey (Brit Robertson) a salvar al mundo de la extinción y para ello deberá
regresar a esta sociedad perfecta y utópica refugiada en construcciones de
tecnología de avanzada, dirigido por un pragmático Hugh Laurie (Doctor House) y hacer algunos
importantes cambios.
La dupla Lindelof – Bird se luce con una fantástica
película de aventuras y acción retro-futurista, un poco nostálgica e irónica,
pero con un mensaje positivo. El diseño de producción es impactante, los
efectos especiales inmejorables, con una acción y humor que no decaen nunca,
aunque claro, no hay sangre en las escenas de peleas, los únicos decapitados
serán los malvados robots que persiguen a los protagonistas. Y aunque siempre
nos quedará la duda de cómo podría haber sido la película, con los mismos
actores, guionistas y director, pero sin la tutela del viejo Walt, no podemos
dejar de admirar la creatividad desplegada en esta ambiciosa historia, que es,
por lejos, la mejor película de Disney (con actores de carne y hueso al menos)
de la década.
Peliculómetro: 83%
FICHA TÉCNICA:
TÍTULO ORIGINAL: “Tomorrowland” (2D)
GÉNERO: Ciencia Ficción
- Aventuras.
PAÍS: Estados Unidos / 2015.
DIRECCIÓN:
Brad Bird
ELENCO:
George Clooney, Hugh Laurie, Britt Robertson, Raffey Cassidy, Judy Greer,
Kathryn Hahn, Lochlyn Munro, Chris Bauer, Tim McGraw, Paul McGillion y Raiden
Integra.
GUIÓN: Damon Lindelof y Brad Bird.
PRODUCCIÓN: Brad Bird, Damon Lindelof y Jeffrey Chernov
DURACIÓN: 130 minutos.
PÁGINA WEB: http://movies.disney.com/tomorrowland/
CALIFICACIÓN: Apta para mayores de 13 años.
IDIOMA: Doblada al español.
CINE: Flix Cinema (Cine
Walmart)
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